Tu web en WordPress ya está finalizada, ¡bien!
Ahora, asalta una duda que estoy muy acostumbrada a escuchar en mis clientes… ¿Puedo mantener yo mismo mi página web?
La respuesta depende de algunos factores como tu habilidad, tu tiempo disponible o la magnitud del proyecto web. Pero por lo general, sí es posible que puedas encargarte tú mismo de esta tarea.
Juegas con un factor a favor: la herramienta de WordPress, que es flexible e intuitiva. Por ello, quiero enseñarte en estas líneas cómo aprovecharla para que puedas hacer el mantenimiento técnico de tu página web y dormir tranquilo.
1. Realiza backups (copias de seguridad) periódicamente
Las catástrofes ocurren. Un día te levantas y desaparece el último trabajo que realizaste en tu web, desaparecen los estilos, no hay base de datos…
Yo lo he vivido y créeme, no es nada agradable.
Para evitar este tipo de sustos, debes instalar un plugin que realice backups automáticos de tu página web. Yo ye recomiendo BackWPup, que es el que nosotros utilizamos.
Si tienes cualquier problema, puedes restaurar la última versión guardada de tu web. Fácil y rápido.
Te recomiendo que lo configures para realizar, al menos, una copia de seguridad a la semana.
2. Actualiza plugins y componentes
WordPress es una herramienta viva. Tanto la misma, como sus componentes, se optimizan de forma continua para mejorar el servicio.
Debes tener todas las actualizaciones al día:
- WordPress
- Tu tema (plantilla)
- Plugins
Si no lo haces, puedes encontrarte con fallos de funcionalidades y problemas de seguridad.
Te recomiendo que te encargues de esta tarea una vez a la semana. Recuerda hacer una copia de seguridad antes de ponerte a ello.
3. Revisa las funcionalidades
Uno de los elementos más importantes de tu página web, seguramente, sea el formulario de contacto. Puede ser el responsable directo de que un nuevo cliente, «llame a tu puerta».
Siendo consciente de ello, sería una irresponsabilidad no revisarlos de forma regular. Nosotros lo hacemos una vez a la semana, y no es raro detectar problemas de cuando en cuando.
Por otro lado, los links también tienden a dar problemas en alguna ocasión. Evidentemente, es inviable revisarlos uno por uno. Para ello existen herramientas como Broken link checker, que nos avisa de los enlaces rotos.
¡No te la juegues!
4. Un poco de limpieza
Con el tiempo, es normal que vayas cargando tu WordPress de «basura». Estos consejos te ayudarán a limpiarlo, mejorando así su vida y la velocidad de carga:
- Optimiza todas las imágenes que subas. En el post «Cómo optimizar imágenes para web» te enseño cómo hacerlo paso a paso.
- Asegúrate de que todos los plugins que te descargues son de calidad. Borra los que no utilices.
- Fulmina el spam. Utiliza códigos captcha en tus formularios y apóyate del plugin Akismet.
5. Revisa, revisa, revisa
No está de más que hagas revisiones completas también de diseño y estructura. Muchas veces, al añadir contenidos nuevos, desajustamos otros elementos. Especialmente en responsive (versión adaptada a dispositivos móviles).
Ten en cuenta que el uso del móvil para navegar por internet, actualmente supera al del ordenador y continúa creciendo.
La conclusión
En conclusión, estás son las tareas básicas que debes llevar a cabo para mantener tu web en un estado saludable.
Es importante que lo lleves a cabo. Si no tienes tiempo para ello, deberás considerar encomendar la tarea a un profesional. Incluso puedes contar con un técnico que te ayude de forma puntual. Pero si lo dejas pasar, el problema puede ir mucho más allá y ser irreversible.
Y tu, ¿llevas el mantenimiento de tu web periódicamente? ¿qué problemas te has encontrado o qué te preocupa más?
¡Estoy aquí para leerte!